Animación, Violencia y Deseo
Por qué en Prografos no analizaremos Knights of Guinevere y por qué decimos 'No' a cierto contenido.
El viernes pasado (19 de septiembre) salió al público el estreno del episodio piloto de Knights of Guinevere, un thriller psicológico creado por Dana Terrace, John Bailey Owen, y Zach Marcus, y producido por Glitch Productions. Se trata de un producto para adultos, que no rehúye representar violencia sangrienta y horror corporal (body horror) en un contexto de profunda desigualdad social, sino que instrumentaliza estos recursos para enfatizar visualmente su narrativa y generar impacto.
En Prografos hablamos sobre animación, pero no quiero elaborar sobre Knights of Guinevere, por las mismas razones por las que no quiero elaborar sobre otros productos de animación para adultos.
Hoy, vamos a explorar las razones de esa negativa en general.

Para evitar glorificar la violencia
Muchas producciones animadas para adultos instrumentalizan la violencia para causar impacto, y, en ocasiones, esto puede llegar a normalizarla o, peor aún, a glorificarla. Como cristianos, se nos llama a ser pacificadores y a amar a nuestros enemigos, no a deleitarnos en la violencia.
La Biblia nos enseña que la vida humana es sagrada y que la violencia es una consecuencia trágica de la caída. Jesús mismo condenó la ira y el odio en el corazón. Cuando vemos violencia extrema representada de forma gráfica y cruda, podemos insensibilizarnos ante el sufrimiento ajeno. En lugar de desarrollar empatía, podemos llegar a disfrutar del espectáculo.
El Salmo 11:5 nos dice que el Señor "aborrece al que ama la violencia". Como seguidores de Cristo, debemos procurar que nuestra vista, nuestros oídos y, en general, nuestra vida no se nutran de aquello que desagrada a Dios. Por eso, preferimos no dar espacio en nuestro blog a producciones que glorifican la violencia.
Para evitar contenido erótico
Muchas de las producciones de animación para adultos incluyen contenido erótico, desde lo sugestivo hasta lo explícito.
Recordemos que la finalidad principal del contenido erótico es generar una respuesta emocional y física relacionada con el deseo sexual en quien lo consume.
Ya sea que se trate de algunas escenas de desnudos en pantalla, o de la representación gráfica de actos sexuales; no quiero provocar que los lectores de Prografos encuentren contenido erótico en animación, por culpa de una de mis recomendaciones. Sin importar cuán artística pueda ser la producción, o cuán profunda pueda ser su exploración temática, el contenido erótico hace que no valga la pena el riesgo. No quiero pecar, y no quiero conducir a mis lectores a pecar.
“Pero yo os digo que todo el que mire a una mujer para codiciarla ya cometió adulterio con ella en su corazón.”
—Mateo 5:28
Claro que el contenido erótico no es exclusivo de la animación para adultos. De hecho, es preocupante cuán ubicuo resulta hoy en día. Pero eso no reduce ni excusa nuestra responsabilidad de guardar nuestros corazones (Proverbios 4:23).
Para no ser piedra de tropiezo para otros
Este es un principio crucial para nosotros. No se trata solo de lo que es "correcto" para nosotros individualmente, sino de cómo nuestras acciones impactan a otros hermanos en la fe.
1 Corintios 8:7-13 nos habla precisamente de esto1. Pablo aborda el tema de comer carne sacrificada a los ídolos. Aunque para él no era un problema en sí mismo, entendió que su libertad podía ser un obstáculo para un hermano cuya conciencia era más débil. ¿La conclusión? Él preferiría no comer carne nunca, antes que hacer que un hermano tropiece.
De la misma manera, aunque a algunos de nosotros no nos afecte personalmente la violencia o el contenido explícito de ciertas series, no podemos asumir que nuestros lectores tienen la misma madurez o la misma fortaleza. Al recomendar o escribir sobre una producción que contiene estos elementos, podríamos estar alentando a alguien a ver algo que dañe su fe, que despierte en ellos malos deseos o que los aleje del camino. No queremos ser un obstáculo en el camino de la santificación de nadie.
Desde una perspectiva bíblica, vale la pena hablar y analizar producciones animadas para adultos cuando su contenido aborda críticas morales y éticas válidas. Esto se alinea con el llamado bíblico a la sabiduría, el discernimiento y la reflexión sobre la condición humana. La Biblia no solo presenta preceptos morales, sino que también ofrece narrativas complejas que exponen las consecuencias del pecado y el sufrimiento, invitando al creyente a una profunda meditación.
El libro de Proverbios, por ejemplo, está lleno de enseñanzas que invitan a buscar la sabiduría y el entendimiento (Proverbios 4:7).
Analizar una película como Grave of the Fireflies (1988)2, que muestra la devastación causada por la guerra y la indiferencia, es un ejercicio de discernimiento. Permite reflexionar sobre las fallas humanas y las consecuencias de las malas decisiones, temas centrales en muchas narrativas bíblicas. Al ver la trágica historia de Seita y Setsuko, se pueden comprender de forma más tangible los efectos de la guerra, el orgullo y la falta de compasión, que son conceptos que la Biblia aborda repetidamente.
Jesucristo, en su ministerio, se identificó con los marginados y los que sufren. La parábola del buen samaritano (Lucas 10:25-37) subraya la importancia de la compasión activa y la ayuda al prójimo. Grave of the Fireflies presenta una poderosa llamada a la compasión, al mostrar el sufrimiento de dos niños indefensos en un contexto de guerra. Analizar esta obra puede sensibilizar a la audiencia ante el dolor ajeno, impulsándolos a reflexionar sobre su propia capacidad de respuesta ante el sufrimiento en el mundo real. Es una forma de aplicar el principio bíblico de "llorar con los que lloran" (Romanos 12:15).
La perspectiva bíblica
La teología bíblica enseña que la humanidad, a partir de la caída, vive en un estado de imperfección y pecado. Todos somos pecadores (Romanos 3:9-18).
Al estudiar estos temas en una obra de animación, podemos obtener una comprensión más profunda de la lucha entre el bien y el mal, la fragilidad moral y la necesidad de redención. No solo se analiza la obra en sí, sino que se utiliza como un espejo para examinar la propia vida y la sociedad, buscando una perspectiva más cercana a los valores del Reino de Dios.
El análisis de obras de animación puede ser una forma de cultivar el intelecto y el espíritu, aplicando principios bíblicos para entender mejor el mundo y la condición humana, y así buscar vivir de una manera más sabia y compasiva.
1 Corintios 10:23 nos recuerda que:
“Todo es lícito, pero no todo es de provecho. Todo es lícito, pero no todo edifica.”
Esta es la esencia de la libertad en Cristo. No se trata de una licencia para hacer lo que queramos, sino de una oportunidad para elegir aquello que nos acerca más a Dios y que beneficia a los demás.
Nuestra libertad no es para gratificarnos a nosotros mismos, sino para servir. En el contexto de la animación, eso significa que, aunque "podemos" ver cualquier cosa, debemos preguntarnos: ¿Es esto conveniente? ¿Me edifica? ¿Edifica a otros?
“Antes bien, examinadlo todo cuidadosamente, retened lo bueno; absteneos de toda forma de mal.”
—1 Tesalonicenses 5:21-22
Aquí se nos da una tarea activa: no consumir sin pensar, sino evaluar y discernir.
En un mundo saturado de contenido, el discernimiento es una habilidad vital. Debemos entrenar nuestra mente para reconocer lo que es puro, lo que es digno de elogio y lo que no lo es. Esto no es solo para el entretenimiento, sino para cada área de nuestra vida.
“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo digno, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo honorable, si hay alguna virtud o algo que merece elogio, en esto meditad”
—Filipenses 4:8
Nuestro objetivo en Prografos no es seguir lo que sea que esté de moda, sin ser críticos, sino apuntar a la verdad y a la belleza que se puede encontrar en la animación, reconociéndola como una forma de arte increíble. A la vez, queremos hacerlo de una manera que honre a Dios y que sirva de bendición para cada uno de ustedes. ¡Gracias por ser parte de este camino con nosotros!
La cita completa de 1 Corintios 8:7-13 dice:
”Sin embargo, no todos tienen este conocimiento; sino que algunos, estando acostumbrados al ídolo hasta ahora, comen alimento como si este fuera sacrificado a un ídolo; y su conciencia, siendo débil, se mancha. Pero la comida no nos recomendará a Dios, pues ni somos menos si no comemos, ni somos más si comemos. Mas tened cuidado, no sea que esta vuestra libertad de alguna manera se convierta en piedra de tropiezo para el débil. Porque si alguno te ve a ti, que tienes conocimiento, sentado a la mesa en un templo de ídolos, ¿no será estimulada su conciencia, si él es débil, a comer lo sacrificado a los ídolos? Y por tu conocimiento se perderá el que es débil, el hermano por quien Cristo murió. Y así, al pecar contra los hermanos y herir su conciencia cuando esta es débil, pecáis contra Cristo. Por consiguiente, si la comida hace que mi hermano tropiece, no comeré carne jamás, para no hacer tropezar a mi hermano.”
Grave of the Fireflies, dirigida por Isao Takahata y producida por Studio Ghibli, en 1988, es la trágica historia de dos hermanos huérfanos que luchan desesperadamente por sobrevivir en medio de la indiferencia social en Japón durante los meses finales de la Segunda Guerra Mundial. La película es un devastador retrato de cómo el conflicto y la negligencia adulta afectan a la infancia.